Sé que es un poco raro pero comenzaré contradiciendo el título, las ideas jamás se esconden, generalmente están ahí frente a nosotros pidiendo a gritos que les demos una oportunidad para transformarlas en algo excepcional. En la industria publicitaria el pan nuestro de cada día son las ideas, pero para llegar a una buena es necesario primero haber tenido muchas malas, o no tan buenas, que al pasar por un proceso llegaron a convertirse en la gran idea que estábamos buscando.
Eso sí, no esperes que las ideas aparezcan repentinamente mientras estás sentado enfrente de tu escritorio, ¡sal! Las ideas están allá afuera; en tu traslado al trabajo, en los colores del semáforo, en el vagabundo dormido a media cuadra, en el aroma de tu café. Pero si no tienes tus sentidos activados sólo percibirás cosas comunes y seguirás diciendo – “¡Las ideas se esconden de mí!”
Es verdad que existen cientos de técnicas de creatividad que ayudan a hacer fluir las ideas, sin embargo éste no es el tema del que quiero platicarte, sino más bien de tu capacidad perceptiva para detectar una buena idea. Trabajar en tu percepción es una excelente manera de desarrollar tu capacidad creativa, al fin y al cabo la creatividad se basa en la forma en la que percibes al mundo y la manera en la que conectas todo lo que ves, sientes, pruebas, escuchas o hueles para encontrar la solución de algo.
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